Uno de mis paseos

Era sábado, me levanté bien temprano porque nuestra idea iba ir a conocer un centro de compra que se había innagurado hacía meses; como me gustan las fuentes de agua, creí que esa sería mi atracción aquel día, en el mes de hace un tiempo, pero ahora es cuando tengo tiempo de contarles lo que ocurrió.
Pues bien, me desilucionó el centro comercial, a pesar de sus pisos, no encontramos ningún banco para sentarnos, había una fuente que solo tenía un chorro de agua pero nada impactante, parecía que quien diseñó el lugar no pensó en hacer algo extraordinario, sino un lugar con locales que venden sus productos, creo que en menos de una hora, ya lo había todo.
Bueno, cuando habíamos decidido regresar, al salir del lugar....
Conocó a Lucky y Yimi, ah... se preguntaran quienes son?
Se me llenaron los ojos de lágrimas y no pude pasar sin hablar con su dueño Rodolfo.
Bueno descubrí su inmenso amor por los animales, es segundos parecía que nos conocíamos de toda la vida.
Él me contó que primero la suerte que Yimi, que un familiar que lo había ido a visita, lo pisó con el auto sin querer, porque no lo vió. Su cadera se quebró. Aunque tuvo tratamiento veterinario, nada se podía hacer. Buscó en muchos lugares un andador para su perro, pero no encontró en ninguna veterinaria, entonces decidió hacerla él mismo.
Veía que su perrito seguí con las mismas ganas de jugar y correr, y así fué que con ingenio y amor le devolvió a su mascota la libertad.
Lo mantiene con una correa cuando salen ya que cuando escucha ladrar a otros perros sale como una luz corriendo hasta ver porqué ladran, así lo pude comprobar en el centro comercial y pude ver la alegría que llevaba en su rostro, además de ser todo un personaje es muy listo.
Antes al arrastrarse se lastimaba sus patitas traseras, cuando no quiere estar en el andador y quiere sentarse un ratito mira dónde está parado su dueño, y como calculado retrocede despacito hasta que su pie se sube y trata que el andador vaya hacia adelante, para sacárselo solo, cosa que no puede porque sus patitas son atadas al ser colocado en el andador.
Luego llegó Lucky
Una vecina de Rodolfo le avisó que había un perrito en las mismas condiciones lejos de su hogar frente a un hospital tirado, le pidió tantas veces que no pudo negarse más.
Cuando lo vió, no pudo dejarlo allí, lo tomó entre sus brazos y lo llevó a su hogar.
También le fabricó su andador, ahora Lucky y Yimi son compañeros de corridas juntos sobre ruedas.
No puedo describir la alegría que me produjo ese día conocerlos, además me enteré que uno de ellos no recuerdo quién es el que suele colaborar con una escuela de niños con discapacidad motora.
Mucha gente que ha conocido a Rodolfo se para a conversar con él, es un hombre que inspira confianza, habla de sus perros con los ojos iluminados de alegría, yo sé que sabe el amor que les brinda y la enseñanza que les da a la gente que los ve, sus perritos no son de ningún tipo de raza, y le dan el mismo amor que le podría dar cualquier perro y el hecho de prestar un perrito para que ayude a niños con discapacidades motoras, habla de su buen corazón, no cobra por esta actividad que hace su perro, es solidario.
Además cuenta que ha tenido pedidos para hacer otros carritos y los hace de corazón, por el amor a los animales, no cobra su realización y muchos le devuelven el favor con lo que ellos creen que puede aceptar este señor, no admite que le paguen con dinero.
Si alguien se encuentra a misma situación que se encontró Rodolfo y quieren darle una oportunidad a sus mascotas no duden en llamarlo.
Les dejo el teléfono de la hija, con autorización previa de él, por supuesto: 011-1550422140, pregunten por Marcela. No se suelen conseguir este tipo de andador para perros, la idea de este post es que si se pueden ayudar a los perros a tener una mejor calidad de vida, deberíamos hacerlo. Hay gente que ante los costos elevados de algunos sitios desiden sacrificar a sus mascotas y creo que este post los puede ayudar a cambiar de idea.
A continuación verán a los pequeños Lucky es el color de pelo marrón clarito y Yimi es el otro.